Los sueños son las alas que te permiten tocar el cielo...sin despegar los pies del suelo

"Nadie dijo que la vida sería fácil, sólo prometieron que valdría la pena vivirla. Los sueños son las alas que te permiten tocar el cielo...sin despegar los pies del suelo"

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Espero que disfruteis de cada apartado de este blog de la misma manera que disfruto yo haciéndolo

domingo, 21 de octubre de 2012

La constancia es superación

"A David le encantaba el baloncesto. Soñaba con entrar en el equipo del colegio y todos los años lo intentaba, pero siempre ocurría lo mismo, el entrenador le decía que era demasiado bajito. Este año sólo quedaba un día para la prueba del equipo y David estaba decidido a conseguirlo. Estuvo todo el recreo practicando. El entrenador pasó por su lado y le miró fijamente.

- Es admirable tu esfuerzo – le dijo -, pero aún eres muy bajito para el equipo.
- Mañana voy a ir a la prueba – le aseguró David.

David llegó a su casa un poco desanimado, pensaba que no era justo. Él se esforzaba más que los demás y era capaz de meter tantas canastas como el resto.

- ¡Papá, necesito crecer! – le dijo David.

Su padre sonrió.

- No te preocupes. Sigue practicando y pronto lo conseguirás.

David pasó toda la tarde haciendo lanzamientos, encestaba todas y cada una de las veces que tiraba al aro. Su padre le miraba atento y le daba consejos que David seguía a rajatabla. Deseaba tanto entrar en el equipo que no descansó ni un minuto hasta que su madre le llamó para que subiese a cenar.

David permaneció callado durante toda la cena, mientras que Alberto, su hermano pequeño, no paraba de parlotear.

- ¿Qué te ocurre David? – le preguntó su madre preocupada al ver que casi no había cenado nada.
- Mamá, ¿tú crees qué creceré esta noche? – le preguntó.

Su madre le miró sorprendida.
- Es que si no crezco, el entrenador no me va a dejar entrar en el equipo del colegio – le explicó.

Su madre sonrió.
- Todo puede ser – le dijo -. Los sueños, a veces, se convierten en realidad.

Esa noche David se acostó muy nervioso, esperaba que su madre tuviese razón y que llegase a crecer durante la noche. Por la mañana David se levantó incluso antes de que sonase el despertador y fue a ponerse su ropa rápidamente. Se miró en el espejo, apenas podía creer lo que estaba viendo, la camiseta le quedaba a la altura del obligo y los pantalones eran mucho más cortos de lo habitual. ¡Había crecido!

David se fue contentísimo a las pruebas de baloncesto. Ahora el entrenador no iba a encontrar ninguna excusa para no aceptarle en el equipo.

David hizo una prueba estupenda, encestó todos los lanzamientos, dio unos pases geniales a sus compañeros, taponó varios tiros y el resto de niños no paraban de felicitarle.

El entrenador le seguía fijamente desde el banquillo apuntando constantemente notas en su cuaderno. Cuando por fin terminaron las pruebas se pusieron todos los chicos en fila esperando a que el entrenador les nombrase y les comunicase si la habían superado. David se estiró todo lo posible, quería que el entrenador se diese cuenta de lo que había crecido. Uno a uno, el entrenador fue nombrando a todos los niños. Se escuchaba su voz diciendo síes o noes y, a continuación, la cara del niño se alegraba o se entristecía.

- ¡David! – retumbó la voz del entrenador y el niño dio un paso al frente -. He tenido muchas dudas sobre ti, no cabe duda que desprendes entusiasmo y te esfuerzas muchísimo, pero tu estatura sigue siendo un problema.

“¿Mi estatura?” pensó, “¿acaso el entrenador no ve que esta noche he crecido? Si me va toda la ropa pequeña”. Empezó a ponerse nervioso, “¿y si después de todo no pasaba la prueba?”

- Pero hoy has sido el mejor jugador – continuó – así que este año entras en el equipo.
- ¡Viva! – gritó David entusiasmado mientras pegaba saltos de alegría.

Cuando llegó a su casa entró corriendo mientras gritaba:
- ¡Mamá, estoy en el equipo!
- Ves – le dijo su madre mientras le abrazaba -. Los sueños, a veces se cumplen, sobre todo si van acompañado de esfuerzo y tú has trabajado mucho para conseguirlo.
- Mamá – dijo David -. No entiendo por qué el entrenador sigue diciendo que soy bajito, ¿no ves lo corta que me va la ropa?, he crecido esta noche como tú dijiste.

Su madre se rió y le abrazó con fuerza.
- Cariño, esta mañana con las prisas te has puesto la ropa de tu hermano – rió su madre.

Y David aprendió que gracias a la confianza en sí mismo y en su trabajo, los sueños, a veces, se cumplen."

lunes, 15 de octubre de 2012

No quiero estar muerto

Estoy cansado de trabajar y de ver a la misma gente, camino a mi trabajo todos los días, llego a la casa y mi esposa, sirvió lo mismo de la comida para cenar, la cual no me gustó mucho que digamos y tengo que comer la comida que no me gusta. Voy a entrar al baño y mi hija de apenas año y medio no me deja por que quiere jugar conmigo, no entiende que estoy cansado y quiero e
ntrar al baño. Después, tomo mi revista para leerla plácidamente en mi sillón y mi hija nuevamente quiere jugar y que la arrulle entre mis brazos, yo quiero leer mi revista y sale mi esposa con su: - que tal me veo?, me arreglé para ti - le digo que bien sin despegar mis ojos de mi revista, para variar, se enoja conmigo porque dice que no la comprendo y que nunca la escucho, no se por que se enoja si le pongo toda mi atención, es más, aún viendo la t.v. le pongo atención, bueno, siempre y cuando haya malos comerciales, a veces quisiera estar solo y no escuchar nada, yo solo quiero descansar; suficientes problemas tengo en el trabajo para escuchar los de mi casa. Mi Padre también me molesta algunas veces y entre clientes, esposa, hija, padre, me vuelven loco, quiero paz. Lo único bueno es el sueño, al cerrar mis ojos siento un gran alivio de olvidarme de todo y de todos. -

Hola, vengo por ti. - Quien eres tú?, Como entraste ?? - Me manda Dios por ti, dice que escucho tus quejas y tienes razón, es hora de descansar. - Eso no es posible, para eso tendría que estar... - Así es, sí lo estás, ya no te preocuparas por ver a las mismas gentes, ni por caminar, ni de aguantar a tu esposa con su guisos, ni a tu pequeña hija que te moleste, es más, jamás escucharás los consejos de tu padre. - Pero...que va a pasar con todo ?? con mi trabajo?? - No te preocupes, en tu empresa ya contrataron a otra persona para ocupar tu puesto y por cierto, está muy feliz por que no tenía trabajo. - Y mi esposa y mi bebé ?? - A tu esposa le fue dado un buen hombre que la quiere, respeta y admira por sus cualidades que tu nunca observaste en ella y acepta con gusto todos sus guisos sin reclamarle nada, por que gracias a Dios y a ella, tiene algo que llevarse a la boca todos los días a diferencia de otras personas que no tienen nada que comer y pasan hambre hasta por meses y además, se preocupa por tu hija y la quiere como si fuera suya y por muy cansado que siempre llegue del trabajo, le dedica tiempo para jugar con ella, son muy felices. - No, no puedo estar muerto. - Lo siento, la decisión ya fue tomada. Pero...eso significa que jamás volveré a besar la mejillita de mi bebé, ni a decirle te amo a mi esposa, ya no veré a mis amigos para decirles lo mucho que los aprecio, ni darle un abrazo a mi padre, ya no volveré a vivir, ya no existiré más, me enterrarán en el panteón y ahí se quedará mi cuerpo cubierto de tierra. Nunca más volveré a escuchar las palabras que me decían Hey amigo, eres el mejor; Hijo mío, estoy orgulloso de ti; cuanto amo a mi esposo; hermano mío, que bueno que viniste a mi casa; papito... NO, NO QUIERO MORIR, QUIERO VIVIR, envejecer junto a mi esposa, NO QUIERO MORIR TODAVIA.... - Pero es lo que querías, descansar, ahora ya tienes tu descanso eterno, duerme para SIEMPRE. - NO, NO QUIERO, NO QUIERO, POR FAVOR DIOS....!!!! -

Que te pasa amor?, tienes una pesadilla? -dijo mi esposa despertándome. No, no fue una pesadilla, fue otra oportunidad para disfrutar de ti, de mi bebé, de mi familia, de todo lo que tengo. Sabes?, estando muerto ya nada puedes hacer y estando vivo puedes disfrutarlo todo. Una vez cerrando tus ojos, nadie te garantiza volver a abrirlos. QUE BELLO ES VIVIR !!!! HOY LO LOGRE, MAÑANA... MAÑANA DIOS DIRA. Recuerden que despertar cada día es maravilloso aunque las cosas no vayan nada bien, tenemos la oportunidad de despertar...